Bonica del tó

Ayss...¡cómo me cuesta tener cierta regularidad! Sobre todo después de las Navidades, del mini curro en la galería y con el frío que hace en el cuartito donde dibujo. 

Hace tanto frío en mi casa que no abro la puerta cuando llega el cartero porque no me visto hasta las 12. Me levanto a las 8, eso sí, y empiezo a buscar ofertas de trabajo y a enviar auto-candidaturas como una bestia parda, pero todo eso, señores, se puede hacer en pijama. Aunque más que pijama yo llevo un outfit de bonica del tó.  Mi pelete aleonado sin remedio, mi jersey de marinero escandinavo de pura lana comprado en Amsterdam, leggins viejunos, calcetines de lana con bolitas y manta polar del Ikea a modo de capa de super héroe (también en versión Julio Cesar). Luego tengo un accesorio que es Nova, la gata, que prácticamente vive pegada a mis piernas (o a mi escritorio o a mi barriga). 

Al frío se une la maravillosa visita anual de mis sabañones. Se me hinchan los dedos, empiezan a doler las articulaciones y luego a picar como demonios. Sé que tener sabañones es muy de postguerra (pero también tuve la Tiña, ¿qué pasa? Soy old-fashioned.) pero es lo que tiene el frío, la humedad y una circulación sanguínea de una abuela de 80 años. Y con los dedos hinchados cual longanizas pues tampoco apetece dibujar, eso es así. Pero bueno, sigo en ello. 

Yo solo rezo para que no llamen al timbre y que tenga que abrir la puerta con mi modelito mañanero.

Multitasking

Este ha sido un año bastante complicado para mí. Quedarme sin trabajo a principios de año con pocas perspectivas de volver a encontrar algo estable fue realmente un jarro de agua fría para todos mis sueños de futuro. Aún así he aprendido nuevas cosas este año, he hecho cosas que no había hecho antes y me ha servido para no cerrar puertas a proyectos o trabajos que anteriormente no hubiese podido hacer. 

En lo que va de año he trabajado de:

-Azafata/ RRPP para festival de cine de moda

-Producción Ejecutiva para un festival de música y cine

-Gestión de eventos para sociedades de odontólogos

-Secretaría técnica en congresos 

-Ilustradora para catálogo de modas

-Organización y coordinación de talleres handmade

-Comunicación para un festival de cine

-Traducciones para un evento artístico

-Ilustradora para una postal navideña de una ONG

-Redactora de reseñas para un festival de cine

-Vendedora en galería de arte contemporáneo

Es una especie de "no hay mal que por bien no venga", aunque el 2013 tiene toda la pinta de ser igual de "multitasking" que este 2012. 

Back to London

Y mañana vuelta a Londres. La lluvia que siempre moja aunque lleves paraguas, el olor a restaurante barato, los parques interminables, las librerías, los tea con scones, la cerveza caliente, los mercadillos. 

¡Cuánto te he echado de menos!

Nostalgia Grunge

No sé cómo, supongo que a través del Facebook, acabé viendo unos de esos vídeos que algún nostalgico cuelga de un concierto de Pearl Jam, cuando Eddie Vedder era joven, guapo y encantadoramente atormentado y profundo. No suelo verlos, me da un no se qué, una pena infinita, una nostalgia que lo invade todo.

Pues, volví a ver el vídeo, no solo eso, si no todo el documental de "Pearl Jam Twenty" y haciéndome una lista en el Spotify llamada "Cuando era teenager". Lloré un montón viendo el documental, no porque sea especialmente conmovedor, si no por recordar cómo era yo cuando veía esos conciertos en el canal local de mi pueblo (que hacia conexión pirata con la Mtv), cuando escuchaba esas canciones y me las aprendía con la guitarra. Me sorprendí cantando todas y cada una de las canciones, como grabadas a fuego en mi memoria. Soy incapaz de recordar todas las características formales de San Ivo alla Sapienza o las obras más relevantes de la Escuela de Barbizon, pero me sé de memoria todas las letras de los grupos claves de mi pubertad.

Me entristece verme, en el cuarto de mi habitación con los cascos, repitiendo hasta la náusea los mismos acordes, soñando en lo que iba a ser de mayor, con toda la vida por delante, todas elecciones por tomar, todas las puertas abiertas. Podría viajar, conocer a mis ídolos, ser cómo ellos. ¡Claro que todavía tengo toda mi vida por delante!, pero, cuando se tienen 15 años la vida es otra cosa, es una "open road" sin trabas, con el horizonte dibujado en el infinito, donde en cada pequeño paso crees estar más cerca de la meta, pero luego ves que cada paso, conduce a otro paso, y a otro, y a otro. Que de repente te pierdes y ya nada es cristalino, ni puro, ni abierto y lo que parecia una autopista sin curvas se convierte en un camino de cabras. Eddie Vedder se convierte en un fantasma, en una camiseta hecha jirones con la que tu madre pasa el polvo, la imagen de tus sueños perdidos y de tus esperanzas. Me doy cuenta de lo mucho que he cambiado pero a la vez me doy cuenta de que sigo siendo (justo como dicen en "Elderly woman behind the counter in a small town") la misma niña de 15 años recortando fotos de sus ídolos en la Kerrang y, es por eso, por la penica que me da, por lo que no suelo ver esos vídeos. Grunge is not dead, supongo.

Hibernación

Un invierno más de hibernación, de salir poco de casa, buscar trabajo, leer mucho, ver películas, cocinar y dibujar. Así a simple vista parece una de esas maravillosas vidas como las que retratan las hipsters mormonas tipo Rockstar Diaries o UnderbaraClara en su maravillosa casa en medio del nowhere sueco, con su vida solucionada, su maravilloso marido rico y sus vestidos y pelos de ensueño comiendo pizzas y bollos ecológicos con arándanos salvajes sin engordar una onza. Pero no, Barcelona no es tan guay como NY o Estocolmo, mi pelete cae cada día más, tengo que contar los céntimos para hacer la compra y si me paso con el chocolate con churros o las tostadas con Nutella mi culo empieza a querer "to break free" de los vaqueros. Eso es así.

¡Qué rabia dan, y a la vez qué adictivos! ¿Qué tipo de mecanismo sadomasoquista nos lleva a engancharnos a este tipo de cosas? Como esto también: http://richkidsofinstagram.tumblr.com/, Gossip Girl, Girls incluso la Saga Crepúsculo. Supongo que no es muy diferente a las películas de folklóricas durante la Guerra Civil o los melodramas y películas de género de los años 40. Evadirse y soñar con una vida sin estrecheces, olvidándose de lo que realmente importa.

Mi hibernación es, por lo tanto,  una hibernación de pobres. De pobres parados sobrecualificados que sobreviven con menos de 500€ al mes.

Nova

Algunos hablan de tener hijos, nosotros hablamos de tener un segundo gato. 

Ahora tenemos a Nova, una gata gorda de unos 6 años. A pesar de tener un patio enorme sólo para ella, Nova no es digamos una gata atlética, más bien todo lo contrario y eso que desde que vive con nosotros ya no le damos latitas y racionamos su comida. 

No sé si es por su gordura pero ronca como un camionero. Le encanta acompañarme al baño (??!!), pasearse por el patio después de la lluvia y esconderse bajo la ropa recién tendida. 

Un compañero o compañera más joven quizás le animaría a salir un poco y jugar y dejar de pegarse esas siestazas. Pero también da pereza ahora ponerse otra vez a criar un gatito, que, aunque muy monos, todos sabemos cómo son y lo que hacen: maullar sin ninguna consideración cuando quieren algo, hacer confeti con el papel de water, rascar las puertas hasta que les abres, subirse a las mesa  y cepillarse la comida a la mínima que te descuidas, subirse a la cama cuando estás durmiendo y chuparte los párpados para que despiertes... 

Nova, aunque gorda y roncadora, está muy bien educada y pocas veces hace trastadas. Sólo de vez en cuando  gira 3/4 la cabeza y pone sus ojirris de "gato de Shreck" pidiendo que le des esos trocitos de pollo que estás cortando para la cena.

Reinventarse o McDonalds

Tengo el dilema, una vez termine el par de cosillas que tengo en el tintero, de si buscar un trabajo de jornada completa de lo que sea, o intentar sobrevivir con algo de media jornada y seguir con los dibujos y los proyectos que están ahí pero no acaban de arrancar.

Mis amigas apuntan a lo segundo, que no me vaya del redil ahora que más o menos he conseguido entrar (no se refieren a la ilustración si no a ese maravilloso y frustrante mundo de la gestión cultural). Pero por otro lado hay cosas ineludibles (me gustaría decirlo en inglés, como hace Brad Pitt en el anuncio de Chanel nº5, pero es prácticamente imposible), como pagar el alquiler, la comida y mi infierno en la tierra que es el pago de mi préstamo universitario.

Hace 10 años que soy prácticamente independiente y este 2012 se lleva el trofeo al Año Mierder, con mención especial de destroza orgullo y autoestima. Tener la cuenta a 0 no ayuda a la hora de tomar una decisión, la verdad.

Nos dijeron que si estudiábamos, si sacábamos buenas notas, si íbamos a la universidad, si hablábamos idiomas, si íbamos al extranjero y si hacíamos un postgrado o master post universitario tendríamos un buen trabajo, bien pagado y estable. Ahora, tengo el pack del post-universitario y semi-profesional completo, que no puede arrancar porque cada vez que alza el vuelo se la pega contra el muro de la crisis.

No sé si este es el mejor momento para reinventarse o para empezar a enviar curriculums al McDonalds.